Un ave del drifting: este Pontiac Firebird Trans Am 1978 llega a la pista con la potencia LS

Firebird y auto de drifting no suelen aparecer en una misma frase. Sin embargo, el Pontiac Firebird Trans Am 1978 con motor LS de J.J. Alfano fue una de las estrellas del Drift Challenge durante el Holley LS Fest East de este año.

"Quería hacer algo un poco más genial para eventos como este", explica el piloto oriundo del área de Atlanta durante el espectáculo en Beech Bend Park en Bowling Green, Kentucky.

No es que los autos de drifting japoneses más comunes, como el Nissan 240SX y el 350Z, no sean geniales por derecho propio. Alfano inclusive tiene de cerca de una docena de ellos. Muchos de esos autos en todo el país están propulsados por el versátil motor GM LS, y el propio Alfano compitió con un LS2 que él mismo construyó para su 240.

"Me enamoré de la banda de potencia del V-8", afirma. "No hay nada más fácil que un motor LS".

Aunque muchos de sus competidores utilizan un motor importado, Alfano se ha inclinado por el concepto de muscle car americano con su Pontiac. Tuvo esa idea después de asistir a un evento en Alabama, donde su amigo hizo campaña con un muscle car y recibió una cantidad significativa de atención.

Alfano es originario de Chamblee, Georgia, un suburbio de Atlanta, y siempre ha sido fan de los autos de General Motors. Además, como "Smokey and the Bandit" tuvo una importante conexión con Atlanta, se decidió por el Trans Am.

"Me encantan estos autos, y el padre de uno de mis mejores amigos tiene uno del 78", afirma. "Así que era este".

El siguiente paso era encontrar uno. Y lo logró al comprar un chasis 1981 que se anunciaba como libre de óxido en Mississippi. Pero no era del todo así. A pesar de los desafíos, él y su equipo de amigos trabajaron en numerosas mejoras, haciendo modificaciones y fabricando piezas, junto con el cambio de los paneles de la nariz y la cola para convertir el auto en un modelo 1978.

"Nos mantuvimos en esa tarea, y luego el auto se asentó desde 2019 hasta el verano de 2020 cuando lo hice debutar", sostiene Alfano. "Estaba todo oxidado y parecía un auto de desguace, porque lo era. Y es como si se hubiera ido desarrollando desde entonces. He mejorado la suspensión, la parte trasera y la transmisión, así que ahora es realmente formidable".

El auto está propulsado por un LM7 de 5.3 L, un motor LS que originalmente se encontraba en una variedad de camionetas y SUV de Chevrolet, GMC y Cadillac del 1999 al 2007. La versión de Alfano genera 360 caballos de fuerza y 315 lb-ft de torque.

"Son súper fáciles de trabajar", señala Alfano. "Si pudiera construir un motor y no reventarlo sería básicamente un juego de Lego".

Victory Fabrication de Cumming, Georgia, fue responsable de la configuración trasera de tres enlaces del Trans Am, y muchas de las piezas de la dirección y la suspensión también están hechas a medida. El auto cuenta con frenos de un Corvette Z06 2006.

Aunque el Trans Am no se quedaba atrás en absoluto cuando se presentó hace décadas, no se construyó para manejarse como una máquina de drift de alto rendimiento, de ahí las diversas modificaciones. Además, el auto salió de la línea de montaje más pesado que muchos de los autos del circuito de drifting, lo que llevó a Alfano a encontrar maneras de reducir el peso.

"(El auto) pesa alrededor de 3,060 libras sin mí", afirma. "Quitamos todo el interior, el diferencial es una unidad totalmente de aluminio y de cambio rápido de Winters. En realidad es un engranaje anular de 10 pulgadas, por lo que es más grande y más fuerte, pero es más ligero que de fábrica. La transmisión de aluminio es más ligera que la de fábrica. Es un motor de hierro, por lo que podría reducir otras 100 libras si optara por el aluminio, pero me ahorré alrededor de 200 libras incluso con la adición de componentes adicionales".

Aunque el coche en sí puede estar en ligera desventaja en el sentido utilitario, su carácter compensa cualquier deficiencia de desempeño.

"Me encantan (los autos japoneses), pero me gusta más este", indica Alfano. "Es difícil de conducir comparado con los demás, pero es muy gratificante". Una buena vuelta bien podría ser una clasificación de 100 puntos en un auto Pro. Es muy impresionante, y la atención que recibe es solo la confirmación. Me encanta".

Independientemente del auto, Alfano es un experto al volante que ha competido en el deporte en el semillero de drifting de Atlanta desde poco después de graduarse en la escuela secundaria en 2007. De niño era aficionado al skate, y pronto descubrió que el drifting compartía muchas de las mismas filosofías.

"Soy un skater que consiguió un trabajo corporativo", explica, refiriéndose a su trabajo a tiempo completo en ventas. "Una cosa que me encanta del skateboarding es el sentido del estilo personal, tanto en el skate como en la ropa y cosas así". Así que me encanta poder ser simplemente diferente. El drifting era extremo, y me estaba haciendo un aficionado a los autos a esa edad. Como tenía que ir en auto a la pista de skate, quería llegar en un auto impactante. El drifting simplemente me convencía por todos lados".

Hoy en día, ha logrado combinar su amor por la expresión personal inherente a la cultura del drifting con su afición por los muscle cars. El resultado es una marca y una persona poco frecuentes en la disciplina.

"Siempre gravité alrededor de General Motors, pero después de conducir un auto LS y construir un LS, me convencí de que la marca del corbatín era para mí de por vida", explica Alfano. "Se trató de una tormenta perfecta, porque me dieron un auto de General Motors. Eso me convenció aún más".

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