Keith mantuvo el interior original del Camaro y, con las mejoras, el auto funcionó consistentemente en el rango medio a bajo, de nueve segundos en el cuarto de milla. Si bien esos números son impresionantes, Keith pronto decidió que quería llevar el auto "al siguiente nivel".

Eso significó cambiar la transmisión original de 10 velocidades por una RPM Transmissions Turbo 400, mejorar las varillas y los pistones del motor y, quizás lo más notable, agregar un sistema biturbo. Además, una admisión monstruosa reemplazó al supercargador.

"El auto, en ese nivel, generaba como 1100 caballos de fuerza y corría a 8.60 s de manera bastante constante", sostuvo Keith. "Pero ya sabes cómo es, siempre quieres ir más rápido".

Eso pronto condujo a más mejoras, incluido un nuevo kit turbo Garrett Motion personalizado y una conversión de la parte trasera G-Force para mejorar el engranaje que se utiliza con la transmisión Turbo 400. Keith también agregó un convertidor de torque de palanquilla Circle D Specialties al tren de transmisión.

El peso de carrera del auto ahora es de alrededor de 3900 libras y ha estado en gran parte de su configuración actual durante dos años. Late Model Engines, en Houston, fue responsable del bloque largo, y después de más de 200 pasadas, Keith no ha tenido problemas con el motor ni con la transmisión.

Durante el evento Street Car Takeover del otoño pasado en Texas Motorplex, en Ennis, Texas, Keith logró pasadas consistentemente más rápidas en el rango de siete segundos, y así rompió el récord de Camaro Gen-6. Su tiempo más rápido fue una ráfaga de 7.568 segundos a 181.30 mph para establecer el récord actual.

Keith se enorgullece de ser un pionero en las carreras de dragsters con su Camaro de último modelo.

"El auto acelera mucho y es muy confiable", dijo. "Es divertido porque mucha gente ve este auto en la pista y dice: 'ah, es un Camaro de sexta generación'". Luego lo ven correr por la pista y capta la atención de todos.

"Los Camaro de sexta y quinta generación realmente no han dejado una gran huella en las carreras de dragsters, pero autos como este hacen que la gente piense: 'bueno, tal vez debería comprar uno de esos'".

El conocimiento de Keith de las modernas plataformas de Chevrolet Performance también se ha trasladado a su trabajo en Killer Performance.

Entre lo que ofrece el taller, se encuentran las camionetas pickup Chevy OBS de cabina regular y caja corta con modernos motores armados Chevrolet Performance LT4* modificados y transmisiones automáticas de 10 velocidades SuperMatic 10L90-E. El taller mantiene la pintura y el interior originales de la camioneta, pero se realizará una restauración completa con el chasis desmontado, el chasis será pulvirrevestido, y se agregará suspensión con resorte y frenos más grandes, además del tren motriz mejorado. El resultado es que la camioneta se maneja como lo haría un Camaro nuevo.

"Prefiero el motor LT, porque es lo último y lo mejor", sostuvo Keith. "También es el cambio más reciente y actualizado. Lo mantiene vigente y, en mi opinión, el LT4 es, probablemente, uno de los mejores motores versátiles que Chevrolet haya fabricado".

Keith es fanático de mantener la apariencia de equipo original en sus proyectos, como lo demuestran los diseños de su Camaro y su camioneta. Además, hay mucha fusión de estilos entre los dos.

"Lo que hacemos con las camionetas con los LT4 se traslada absolutamente (del Camaro)", afirmó. "Honestamente, mucho de lo que aprendí sobre los motores LT fue trabajando en este auto. De hecho, la primera camioneta que construimos fue con el LT4 y la transmisión de 10 velocidades que, en realidad, estaba en este auto. Entonces, lo pusimos en la camioneta. Así fue como empezó todo. Ahora, simplemente llamamos al concesionario, pedimos transmisiones y motores armados LT4 nuevos, y lo hacemos de esa manera".