"Por fin, me animé y comencé a competir en carreras; y ahora soy casi adicto a ellas", aseguró durante la 2022.ª edición de Holley LS Fest East.

Davis es oriundo de Mt. Juliet, en las afueras de Nashville, Tennessee, y Beech Bend Park, en Bowling Green, Kentucky, la sede anual del evento LS Fest, es la pista en la que siente local.

Compite con una Chevrolet S10 1998 negra equipada con un motor LS GM de 6.0 L de aluminio basado en la producción debajo del cofre. La carrera de cuatro pulgadas permite al motor alcanzar las 402 pulgadas cúbicas; utiliza cigüeñal y bielas Callies, pistones Wiseco, culatas rectangulares Trick Flow y un supercargador Kong Performance 2650.

Si bien la camioneta comenzó a recorrer los caminos con un motor de cuatro cilindros, Davis también instaló en ella las opciones LS de 5.3 L y 6.2 L antes de decidirse por la de 6.0.

"Tengo un garaje lleno de motores", aseguró. "La plataforma LS ocupa casi todo mi tiempo de ocio".

Era un fanático de los motores de bloque grande que se pasó a los LS, y los emblemas de LSX que decoran su camioneta reflejan esa conversión.

"Los motores LS alcanzan la potencia de los de bloque grande con facilidad, a menos que te dediques en profundidad a un motor de bloque grande", explicó. "Puedes obtener una buena potencia de forma sencilla, especialmente con cualquier tipo de sumador de potencia… Me hice casi adicto a ellos".

El LS en su camioneta lo ayuda a adherirse bien a la pista de carreras, y el tren motriz también incluye una transmisión FTI Powerglide y un convertidor de torque JW Performance de nueve pulgadas y media.

Davis incorporó dirección por cremallera y piñón, pero la mayor parte de la suspensión es la que viene de fábrica, incluso las hojas de muelle en la parte trasera. Entre los componentes del mercado de recambio, se incluyen un extremo trasero Ford de nueve pulgadas con engranaje 3:70 y amortiguadores ajustables dobles Viking en todo el vehículo, además de características específicas para carreras de dragsters, como barras Smith Racecraft Assassin para incrementar la tracción y barras antivuelco para mantener la camioneta sobre el suelo.

 La S10 pesa 3,400 libras, pero eso no le impide a Davis pararse épicamente en dos ruedas en la línea de largada.

"En realidad, creo que el peso de la camioneta me ayuda con la tracción, porque es muy pesada", explica.

De hecho, Davis ha completado pasadas de 5.57 segundos en dos oportunidades en carreras de un octavo de milla; ambos logros fueron en Beech Bend.

"Tengo mucha suerte de que tenga un desempeño tan bueno, y he recibido gran ayuda de distintas personas que diseñan autos de carreras, además de amigos míos", contó Davis.

Davis con frecuencia visita las pistas y trabaja en su garaje con diversos amigos y familiares, y, durante LS Fest, el Malibu equipado con un motor LSA de su hijo Dylan estaba en los boxes detrás de la camioneta de su padre.

También fue un amigo el que convenció a Davis de salir a la pista por primera vez.

"Casi todos mis amigos compiten en carreras de dragsters de algún tipo, y he estado en el ambiente de las carreras de dragsters desde la primera etapa de mi adolescencia", explicó. "La verdad, era demasiado tímido como para intentarlo. Pero un amigo mío me dijo lo siguiente: 'No importa si hay 10 personas en las gradas o 10,000; no les prestas ningún tipo de atención'. Y tiene razón".

Originalmente, Davis tenía planes de revender su S10, pero, a lo largo de los últimos años, la camioneta se ha convertido en una parte importante de su identidad. Compite con frecuencia y ha corrido en distintas pistas, como Lucas Oil Indianapolis Raceway Park y Bristol Dragway, además de Beech Bend. En LS Fest, compitió en la clase de camionetas y SUV, pero, por lo general, compite en la categoría Super Pro en diversos eventos de carreras de bracket.

"Lo bueno de las carreras de bracket o dragsters es que cualquiera puede competir, independientemente de su presupuesto", sostuvo. "Si tienes un presupuesto reducido, es posible que tu vehículo no sea tan atractivo o rápido, pero igual puedes participar; y te aseguro que es mucho más difícil de lo que parece".

Davis fue propietario de una tienda de radios bidireccionales durante muchos años, pero se "retiró parcialmente" hace dos años y medio, y a menudo emprende proyectos automovilísticos en el taller de su casa. Uno de sus proyectos más recientes fue convertir la pickup Chevy 1967 de uno de sus amigos para instalarle EFI. Trabajar en los vehículos siempre ha sido un pasatiempo para él, aunque muchas veces bromea con que está en el taller desde las 10 a. m. hasta las 10 p. m.