
2020-6-18 | Revista New Roads de Chevy
Cómo Chevy inventó Hot Wheels
La historia de Hot Wheels está inextricablemente vinculada a Chevrolet, tal como te lo pueden confirmar los supercoleccionistas adinerados como Bruce Pascal.
Hot Wheels® quizás sea la marca de juguetes de mayor venta en la historia, con una producción total de más de 6 mil millones de autos desde su fundación en 1968. Esto no solo equivale a 16.5 autitos producidos por segundo; son más autos que los que han vendido las tres automotrices más grandes desde los inicios de la industria. Pero si bien la historia de la marca recibió una abundante cobertura durante su 50.° aniversario en 2018, su conexión directa y continua con Chevrolet es imposible de exagerar.
No hay ningún otro lugar donde esa relación sea más clara que en la colección de 7000 autos y parafernalia de Hot Wheels —valuada en $1.5 millones— que tiene Bruce Pascal, un agente de bienes raíces del área de Washington, D.C. El acopio de Pascal no solo contiene el auto Hot Wheels más valioso que existe, un VW Bus prototipo rosado valuado en hasta $150,000, además incluye todo un tesoro de autitos con el famoso corbatín.

TODO UN TESORO
Además de Hot Wheels Chevrolet de todas las épocas y modelos, la inmensa colección de Bruce Pascal incluye reliquias como pistas Hot Wheels originales y hasta el plano de diseño del Custom Camaro 1967.
"Chevrolet sin duda tiene un lugar especial en Hot Wheels, y uno de los motivos es que el primero que se hizo fue un Camaro", afirma Pascal. Esta primacía era prácticamente un rumor hasta que Pascal compró algunos planos que usaron los diseñadores de Hot Wheels para hacer los moldes para la camada original de 16 autos en el año 1968. La mayoría de los planos de preproducción se atribuyen a inicios del 1968, justo antes del lanzamiento de la marca ese verano. Pero el primero de todos, del 1967, fue el plano para el Custom Camaro. "Para mí es como los Manuscritos del Mar Muerto, es el plano original del primer auto Hot Wheels que se fabricó", comenta Pascal. "Así que cuando hablamos de la historia de Hot Wheels, todo empezó con el Camaro".
Es más, casi todos estos diseños originales fueron hechos por un caballero directamente conectado a la marca Chevrolet. "El primer diseñador de Hot Wheels fue un hombre llamado Harry Bradley", dice Pascal. Bradley, que se graduó del programa de diseño industrial del prestigioso Pratt Institute en Brooklyn, ya era prominente por dedicarse a renovar autos cuando General Motors lo contrató en 1962. Allí trabajó durante cuatro años hasta que Mattel se lo robó para dirigir su nuevo proyecto de autos de juguete.
"Se mudó a California para trabajar en Mattel", cuenta Pascal. "En ese entonces andaba en un El Camino 1964 estrafalario que había modificado. Elliot Handler, el presidente de Mattel, vio el auto estacionado y le pidió a Bradley que haga uno así para Hot Wheels". El resultado: otro modelo del primer año llamado el Custom Fleetside.



A Bradley le preocupaba que Hot Wheels no prosperara, así que se quedó con Mattel por unos pocos años y en 1969 se fue para crear su propia empresa de consultoría de diseño. Pero no antes de haber tenido un rol clave, y algo disruptivo, en introducir otro icono de Chevrolet al mundo de los autos de juguete. Durante su época en GM, según el erudito en Hot Wheels, es probable que Bradley haya supervisado o trabajado en los diseños del venidero C3 Corvette. Fue así que pudo integrar muchos de estos matices de estilo en su trabajo en otro de los primeros modelos de Hot Wheels, el Custom Corvette. El tema fue, según Pascal, que "el Corvette de juguete se fabricó y lanzó al público en 1968, unos meses antes de la presentación del Corvette". (Pascal también posee un componente clave en otro Corvette en la historia de Mattel, el prototipo de 1975 del C3 Star 'Vette 1976 de Barbie).
Con tres vehículos en el primer set de autos, Chevrolet fue la marca mejor representada en los "Sweet Sixteen" de Hot Wheels. Camaros, Corvettes y El Caminos aparecieron en las publicidades de la época para los juguetes nuevos, quizás más prominentemente en la portada del catálogo de productos Mattel para el 1968, que tenía una imagen de un Camaro dorado de lo más brillante yendo a toda velocidad en una sección de pista Hot Wheels naranja. "Chevrolet pintó sus Camaros con estas hermosas pinturas traslúcidas", dice Pascal. "Y los Hot Wheels fueron los primeros autos de juguete que de verdad se pintaron con este tipo de pintura en la producción en masa".
Pero el Camaro en la tapa del catálogo estaba todo engalanado. "Mattel quería que los autos fueran deslumbrantes, como joyas, para que lucieran mejor en las tomas de los comerciales para televisión y publicidades impresas", dice Pascal. "Así que lo que hicieron fue pulir el metal y después aplicaron la pintura arriba, para que brillen como un adorno navideño". Ahora existen solo un puñado de estos supuestos autos "sobrecromados". Pascal tiene varios, entre ellos un Camaro que según dice es uno de sus autos favoritos. "Ese auto probablemente valga $25,000", supone.

¿LO SABÍAS?
Para cubrir la demanda de fans de todas las edades, se fabrican unos 10 millones de Hot Wheels por semana. ¡Esto equivale a la cantidad increíble de 519 millones de Hot Wheels al año! Y para que todos esos Hot Wheels puedan andar se necesitan unos 2 mil millones de ruedas al año.
El hecho de que los autos Chevrolet fueron tan prominentes en las primeras producciones de Hot Wheels en cierto modo ha elevado su valor coleccionable entre los devotos más fieles. "Entre los primeros 16 autos, el Corvette y el Camaro son los más buscados, lejos. Si está en buen estado, hablamos de cientos de dólares. Y pueden llegar a los miles si es un color poco común, como rosado", afirma Pascal. "Cuando me llaman diciendo que tienen una colección de autos a la venta, y me sucede todo el tiempo, lo primero que pregunto es: '¿Tienes algún Camaro?'".
Pascal está tan comprometido con sus marcas amadas que en 2013 compró una versión tamaño real de un Camaro Hot Wheels para su colección: un convertible azul con capota negra, parte de una tirada limitada creada como autos de desfile para la carrera Indianápolis 500 de ese año. Después lo vendió, pero Chevrolet hizo otro Camaro Hot Wheels tamaño real en 2018. Para celebrar el 50.° aniversario de la marca, este estaba pintado en naranja en alusión a la emblemática pista de carreras naranja. Y lo más importante para Pascal, venía equipado con un plus más que interesante. "A todos los que compraron ese Camaro tamaño real les dieron un set de Hot Wheels color naranja", cuenta Pascal. Para el hombre que tiene casi todos los autos de juguete que desee, esta pieza de fundición se ha convertido en su propio unicornio personal.
"Los vengo buscando desde hace muchísimo, y he visto a gente en convenciones que compró el auto y muestran esos Hot Wheels con orgullo. He ofrecido $500 o más, pero nunca los venden. Así que...", hace una pausa para llamar la atención, medio en broma. "¿Podrías hablar con la gente de Chevy para que me consigan uno?"
HISTORIA: BRETT BERK / FOTOGRAFÍA: JENNY RISHER