
2019-10-8 | Revista New Roads de Chevy
Un recorrido espeluznante en Nueva Orleans
La Chevrolet Blazer es nuestra elegante compañera de viajes para una excursión por una de las ciudades más adoradas y embrujadas de Estados Unidos.
Nueva Orleans es un lugar mágico, la ciudad que se mantuvo durante 301 años sobre una porción de suelo que debería, sin dudas, estar ya bajo el agua. Sin embargo NOLA fue hogar de culturas singulares, personalidades legendarias y tradiciones extraordinarias mucho antes que otros lugares del país siquiera figuraran en los mapas.
Como muchas ciudades venerables, los siglos de gloria de Nueva Orleans, combinados con tradiciones funerarias únicas y cementerios imperdibles han dado lugar a más de una historia de fantasmas, embrujos y seductores temores en general. De hecho, uno puede pasar un día o fin de semana completo conociendo los mejores lugares embrujados.
"La gente le tiene pavor a los muertos", dice Carolyn DePalma, una entusiasta guía de Ghost City Tours. "Pero para mí los cementerios son de los lugares más apacibles de la ciudad".
Nos sumamos a DePalma para pasear por la ciudad en la Chevrolet Blazer 2019 y sentir algunos escalofríos en el camino. DePalma se mudó desde Chicago y descubrió su fascinación por la historia de Nueva Orleans. Es guía, escribe para excursiones nuevas y en general le encanta mostrarle a la gente su ciudad por adopción.
Los detalles importan

BLAZER
3.6 L
MOTOR V6
TRANSMISIÓN AUTOMÁTICA
DE 9 VEL.
64.2 PIES CÚBICOS
CAPACIDAD† DE CARGA
Puertas ornamentadas de hierro forjado que protegen el ingreso a los cementerios de toda Nueva Orleans. Nuesta Blazer RS Rojo† Cajún fue ideal para explorarlos, junto con otras encantadoramente hermosas partes de la ciudad.
Perro fantasma
Lugar: vecindario St. Roch, 7th Ward
Cuándo visitarlo: temprano por la mañana o tarde por la noche
El evento más espeluznante: un perro fantasma que se esfuma al acercarte
El hermoso vecindario de St. Roch (pronunciado como "rock" si quieres sonar como un lugareño) está emplazado entre los vecindarios 7th Wards y Bywater, que no tienen mucha afluencia de turistas. Caracterizado por sus sorprendentes trabajos de hierro forjado y piedras talladas, junto con una fascinante historia de terror, el lugar bien vale el viaje corto desde el Barrio Francés.
Se dice que el portador del nombre Saint Roch fue salvado de la peste bubónica cuando el perro de un noble lo encontró en un paraje silvestre, le llevó pan y lamió sus heridas. El Reverendo P.L. Thevis invocó a Roch durante un brote de fiebre amarilla en Nueva Orleans a finales del siglo 19, y la leyenda cuenta que nadie en la comunidad de Thevis contrajo la fiebre. La inscripción "En cumplimiento de un juramento" sigue en la capilla que el buen reverendo construyó para honrar la protección de este santo.
Mientras paseamos por las tranquilas calles de St.Roch, DePalma advierte que no intentemos rescatar al perro vagabundo que tengamos la suerte de ver. "La gente cuenta historias sobre un 'perro fantasma'",dice nuestra guía. "A veces se lo ve con un hombre mayor que lleva una capa, y el perro desaparece cuando la gente se acerca".

CAMINO DE LA CRIPTA EN UNA BLAZER
El Barrio Francés es ideal para caminar, pero con la Blazer puede aprovechar el potencial de conocer toda la ciudad. Invita a unos amigos a acompañarte en los espaciosos asientos traseros para pasear por cementerios en los límites del Barrio que datan de los años 1800 y tendrás una experiencia histórica verdaderamente espeluznante.
Mejor todavía, ve hasta el centro por St. Charles Street al antiguo barrio americano de la ciudad, hoy más conocido como Garden District. Sus calles rodeadas de arboledas son ideales para pasear, pero también verás cementerios con sus propias historias de fantasmas. Atraviesa los portales de hierro forjado y pasea por los corredores de criptas para descubrir sus secretos.
"Nueva Orleans es una ciudad 'elige tu propia aventura'", ríe DePalma. Con algunos amigos y unos días libres, las aventuras terroríficas son prácticamente interminables.
Hotel hospital
Lugar: Hotel Provincial, 1024 Chartres Street
Construido en: 1820 aproximadamente
Cuándo visitarlo: 8:00 a. m. a 10:00 p. m.
El evento más espeluznante: escena de un hospital de la época de la guerra en el segundo piso
Las calles del Barrio Francés tienen una apariencia espectral temprano por la mañana a través de las ventanillas de la confortable cabina de nuestra Blazer. La niebla es espesa y está baja sobre las calles, sin una gota de aire que la mueva, justo por encima de las cabezas de los transeúntes de manera que por un instante parecen fantasmas. A esta hora del día, el viaje corto desde el terrorífico (en círculos de cazafantasmas) Hotel Provincial realmente da miedo.
En muchos aspectos el hotel es de lo más encantador. El Provincial está ubicado sobre una cuadra hermosa de Chartres Street, con esos balcones de estilo español y paredes de ladrillos que le aportan su merecido atractivo al Barrio Francés. Una entrada para autos amplia da acceso al patio interno y estacionamiento, así que fue fácil estacionar la Blazer aquí.
Pero no todos reservan en el Provincial por sus habitaciones pintorescas y belleza calma. Algunos llegan aquí por su historia de embrujos. Durante la Guerra Civil, los edificios del hotel se usaban como hospital para los soldados heridos. Algunas de esas almas perdidas y sus cuidadores parecen haber permanecido en el lugar donde encontraron la muerte, ya que tanto huéspedes como empleados han mencionado apariciones de una figura con un vestido largo de color blanco que recuerda a una enfermera de aquella época.
Cuenta una leyenda que un guardia del hotel salió del ascensor en el seguro piso y se topó con una escena desesperada del hospital durante la guerra. (Se volvió a subir al ascensor de inmediato).
Así visites el Hotel Provincial o espíes el restaurante Muriel's Jackson Square, la Blazer RS se siente como en casa aquí, en Nueva Orleans, donde hace su propia aparición impactante.
Invitación a cenar
Lugar: Muriel's Jackson Square, 801 Chartres Street
Construido en: 1718
Cuándo visitarlo: 11:00 a. m. a 10:00 p. m.
El evento más espeluznante: un vaso de vidrio vuela a través de la cocina desde un estante
Justo contra Jackson Square, el pintoresco restaurante Muriel's abre su legado sobrenatural al público para que lo puedan contemplar los clientes y cualquier persona que pase por allí. Mira de cerca a través de las ventanas enrejadas del comedor sobre Chartres Street y verás una mesa preparada para la cena, sin comensales a la vista: es una ofrenda de pan y vino para los muertos entre los festines diarios de cocina cajún y criolla para los vivos.
La mesa aislada está allí para apaciguar al antiguo dueño de la mansión que con el tiempo se convirtió en el restaurante Muriel's. Se dice que Pierre Antoine Lepardi Jourdan perdió su amada propiedad en un juego de póquer en una de sus famosas fiestas. Desesperado por haber perdido su hogar, se retiró al segundo piso y se autoflageló.
Desde entonces, siempre hay apariciones en el edificio. Pero cuando hace dos décadas Muriel's se mudó al espacio, algo de la atmósfera festiva del comedor aumentó la actividad paranormal con vasos que vuelan por los ambientes desde sus estantes.
Según DePalma el culpable es el fantasma de Pierre y su obsesión con las fiestas. "Estaba... bueno, básicamente estaba haciendo un berrinche".
Entonces la mesa vacía fue una forma de invitar al antiguo cliente a la fiesta, y así bajar su ira hacia los turistas. Después de todo, un fantasma feliz es buen negocio. "Tal parece que eso lo hizo volver a sentirse bienvenido", dice DePalma.
Lo cierto es que algunas almas están destinadas a permanecer en la ciudad medialuna. Como dice DePalma, "Si Nueva Orleans quiere que te quedes, te quedas. Si no quiere, no".
TEXTO: SEYTH MIERSMA / FOTOGRAFÍA: DANA NEIBERT